No es un post más de recetas. Junto a @naty.crianzasur, asesora en BLW y alimentación consciente, queremos bosquejarte algunas ideas sobre educación alimentaria.
Planificar un #cumplesaludable tiene como primera premisa el correrse del “qué dirán”, si comen, si les gusta. Los niños/as, en casi un 99%, van a los cumples a jugar, transpirar, correr, a divertirse, NO a comer.
Muchas veces, el alimento que se ofrece dista mucho de nutrir e hidratar, para responder al gasto de energía típico de estos eventos. Por el contrario, rebalsamos los platos de comida chatarra y gaseosas que, dicho sea el paso, muchas veces implica una inversión de dinero enorme.
Alegamos que se trata de “ocasiones especiales”, pero puedo asegurarles que en la medida en que la vida social de nuestro retoño/a amplía sus fronteras, las “ocasiones especiales” se multiplicarán.
@naty.crianzasur señala: “Sabemos, por un lado, que el cambio de hábitos implica una reeducación del paladar, pero además: ¿Alguien te pregunta si tu hijo/a come caramelos, tiene alguna alergia, pelean con caries y cepillados, entre otras cosas? ¿Realmente es más incluyente un cumpleaños “tradicional”?”. Para pensar…
Idear un menú es mucho más sencillo de lo que suponemos.
- Las frutas y las verduras son el mejor color.
- Tortas y tartas: hay cientos de opciones mucho más saludables que las tradicionales, a veces cambiando o reduciendo apenas algunos ingredientes.
- Salados: grisines, crackers, pancitos, pizzetas, finger food en general, tarteletas.
- Dulces: trufas, muffins, budines, galletas, bocaditos, alfajorcitos. ¿Han visto las recetas de muffins de este IG?
- Untables: de vegetales, de legumbres, de semillas, de frutos secos.
- Nuggets de pollo hechos en casa
- Mini helados de fruta
- Bebidas: agua, aguas saborizadas y jugos naturales.
Si la creatividad te acompaña, presentá la comida de forma divertida: frutas en brochetas, sandías en triangulitos, bananas con bandanas y caras sonrientes.
¿Qué más se te ocurre? ¿Lo encontrás viable?
